miércoles, 25 de abril de 2012

Echániz, mi consejero

A este espacio no me gusta traer asuntos relacionados con la política, pero las declaraciones oídas y leídas  ayer me han revuelto el estómago y no tengo más remedio que hablar de ellas. 
El consejero de Sanidad y Asuntos Sociales de la Junta de Castilla-La Mancha y secretario de Sanidad y Asuntos Sociales del PP, José Ignacio Echániz ha declarado:  "Mucha gente ha cogido una patera porque sabía que en España tenía la asistencia sanitaria garantizada". Es textual.
¿Sabe este señor cuánta gente ha muerto cruzando el mar que nos separa de África? ¿Sabe cuántos niños, cuántas mujeres, cuántos hombres, jóvenes, mayores? ¿Sabe qué significa dejar mujer e hijos, padres y hermanos para meterse en una barquichuela y adentrarse en un mar desconocido, profundo y negro sin ni siquiera saber nadar? ¿Cuánto sufrimiento, hambre y miseria han de padecer antes de reunir el dinero que tienen que pagar a los traficantes de personas? ¿Cuántas ilusiones rotas para siempre se quedan en esos naufragios? ¿Cuántas esperanzas destrozadas al otro lado esperando esa ayuda de tu ser querido que nunca llegará?
¿Cómo se puede hablar tan alegremente? Cuando lo que está en juego es la vida  ¿se mete uno en un océano porque al otro lado hay medicinas gratis? Precisamente los que intentan estas arriesgadas travesías a la desesperada lo que menos necesitan son medicinas. Vienen los más fuertes, los que pueden aguantar cruzar kilómetros andando, sorteando todo tipo de peligros y mafias para llegar a la tan ansiada orilla y poder coger –sí señor consejero- una patera. Cuando hay hambre y ni un trozo de pan para darle a tus hijos ¿de verdad cree el señor consejero que se juega uno la vida porque en el otro lado la medicina es gratis? Es la mayor falta de sensibilidad que he visto y una ofensa tremenda para toda esa pobre y digna gente.

lunes, 16 de abril de 2012

GRUPO 7

Vengo de ver Grupo 7. Escribo a vuela pluma mis primeras impresiones nada más regresar, aunque nos hemos parado a tomar unos vinos a la salida para desintoxicar. Ahora, en casa, me pongo a dejar aquí, como ya he dicho, mi opinión sobre lo que acabo de ver. Es una película violenta, muy violenta. No había leído ninguna crítica sobre ella, sólo tenía referencias a través de la radio y de terceros de que era una buena peli, así que a falta de otra cosa mejor, (aquí llega todo tarde y en pequeñas dosis) he ido a verla.
Encuentro que la película es correcta, tiene buen ritmo, se ve bien. Como entretenimiento, logra su objetivo. Pero para mí es demasiado violenta, y a una buena película hay que pedirle algo más. Sus personajes son planos,  sólo muestran una cara, no están desarrollados, mucho menos los personajes secundarios. Igual que la época y el lugar: nos dicen muy poco, quizá quieren suplirlo con la memoria de lo que fue la Expo'92. Cada año (durante los que transcurre la acción) nos enseñan un cartel y el avance de las obras de la famosa exposición, pero los escenarios y las situaciones se repiten sin cesar. Comprendo que ahí está lo difícil en una narración, en un guión, en una película: hablar de un asunto y rodearlo, adornarlo, enriquecerlo. 
El guionista pretende hacerlo con la historia de la chica drogadicta, pero pasa lo mismo: no profundiza.
Sin querer destripar el argumento, diré que la escena en que desnudan a los policías me parece sencillamente increíble. Igual que la barba siempre a medio afeitar  del poli gracioso sevillano: eso no era de esos años, es muy posterior.
No entro a calificar los métodos policiales, creo que la peli no pretende criticarlos. Tampoco sé si en aquellos años todavía era común el trato degradante y violento con los delincuentes.


Película: Grupo 7. Dirección: Alberto Rodríguez. País: EspañaDuración: 95 min. Género: AcciónthrillerpoliciacodramaInterpretación: Antonio de la Torre (Rafael), Mario Casas (Ángel),  Inma Cuesta (Elena), José Manuel Poga (Miguel), Joaquín Núñez (Mateo), Julián Villagrán (Joaquín), Estefanía de los Santos (La Caoba), Alfonso Sánchez (Amador), Carlos Olalla (don Julián), Lucía Guerrero (Lucía). Guion: Rafael Cobos. Producción: José Antonio Félez y Gervasio Iglesias. Música: Julio de la Rosa. Fotografía: Alex Catalán. Montaje: José M.G. Moyano. Dirección artística: Pepe Domínguez. Vestuario: Fernando García.

jueves, 12 de abril de 2012

UN HUERTO EN PEDRO BERNARDO (ÁVILA)

A la derecha de la imagen, sólo iniciado, el Valle del Tiétar
  Hace un par de fines de semana visité a unos amigos en la casa que tienen en un pueblo fronterizo: Pedro Bernardo. Pertenece a la provincia de Ávila, pero está situado en la linde de ésta con las de Madrid y Toledo. No es la primera vez que acudo a este lugar; lo he frecuentado en distintas épocas del año y en todas tiene su encanto. En este viaje me he dedicado a tomar fotos de las flores y de algunos árboles que mis amigos han plantado en su huerto y jardín, junto a otros existentes cuando compraron esta pequeña  y rústica construcción que luego transformaron en una bonita casa.


Existen en su huerto árboles ornamentales y frutales como cerezos, melocotoneros, manzanos, perales, membrillos, ciruelos, naranjos y limoneros. Pero sobre todo predominan las higueras autóctonas sayuelas, de higos dulcísimos. La cosecha es tan abundante que, al final del verano, cada superficie en altura es utilizada para secarlos al sol. También tienen mis amigos olivos, vides y alguna parra.

Disposición del terreno en terrazas


Tulipanes y narcisos
 Este pueblo es conocido como balcón del Tiétar. Efectivamente la pequeña población está enclavada en uno de los bordes de la zona oriental de la Sierra de Gredos y tiene todo el valle por donde transcurre el río del mismo nombre a sus pies. Desde cualquier rincón del pueblo se pueden divisar, más allá del valle, los Montes de Toledo.

La inclinación del terreno obliga a plantaciones en forma de terrazas o bancales. Esta disposición tachona todo el paisaje existente bajo la población de variados colores, dependiendo de la época del año y del sembradío o cultivos.

Toda la zona goza de un microclima especial y el suelo de una gran fertilidad al hallarse, a pesar de la altura, al abrigo de la cercana sierra.

Aquí os dejo alguna de mis fotografías.






Petunias
Palmera Washingtonia filifera
Zantedeschia aethiopica, Cala, Lirio de agua o Lirio Cala, por todos esos nombres es conocida.

Capuchinas

Ciclamen


Pensamientos

Lirios

Cerezo


Flores del árbol del paraguayo
Espliego o lavanda.


Alhelíes

Arbusto del desierto australiano

Romero


Laurel
Caléndula