jueves, 7 de julio de 2011

Esas pequeñas cosas




Dependiendo de la categoría del hotel en que te hospedes, te regalan, o no, unos estuchitos para costura. Estos costureritos portátiles son muy útiles en ocasiones. Suelen contener una aguja, un par de alfileres, uno o varios botones, algún imperdible minúsculo, hilo de varios colores y un utensilio que nunca he sabido muy bien para qué sirve, creo que es para enhebrar la aguja, aunque a veces me parece que sirve para corta el hilo... bueno, no lo sé exactamente, supongo que un día de estos lo averiguaré.
Yo suelo tener un estuchito de estos en cada bolso de paseo. También en la bolsa de la playa y en el pequeño bolso que utilizo cuando voy de setas. Guardo uno o dos en el neceser y, por supuesto, conservo bastantes en el costurero grande de casa.
Pues bien, hoy he necesitado algo puntiagudo; me resultaba imprescindible usar alguna aguja o alfiler.
Después de hacer el recorrido por la multitud de recovecos de todos mis bolsos, bolsones y bolsitas, no he encontrado ni uno. Es verdad que estoy fuera de casa, pero aún así me ha costado trabajo aceptarlo.

P.D. Al día siguiente de escribir este post encontré un estuche de estos proveniente de un parador de turismo en un cajón del mueble de mi dormitorio. Habiendo sido previsora, lo había echado en algún sitio de la maleta y, al llegar, lo había guardado con mi bisutería.
Siempre me sorprendo siendo más ordenada de lo que creo y también, vaya por Dios, más olvidadiza.